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25.4.11

El Sistema Político en Israel: Todo se decidió en la Declaración de Independencia

Para entender el Israel de nuestros días, sobre todo en estos tiempos de crisis, nada mejor que volver a las raíces, a las bases. Volvemos a la Declaración de la Independencia: El viernes 14 de mayo de 1948 a las 16 horas, en el salón principal del museo de la calle Rothschild en Tel-Aviv, se reunió la dirigencia interina de la comunidad judía liderada por David Ben-Gurión. En un acto breve, sencillo y a pesar de las distintas amenazas árabes, se declaró la Independencia del Estado de Israel.

Dicha Declaración comenzaría a regir a las 0.00 del día 15 de mayo, hora en que los británicos habían anunciado su retirada.


Ese día se firmaron dos documentos. El primero es la Declaración de la Independencia del Estado de Israel que la podemos dividir en tres partes. Una "histórica", otra "operativa" y una última "declarativa".


La primera parte habla de los derechos históricos que unen a los judíos con Eretz Israel, recuerda la Declaración Balfour como fuente del derecho judío y al Holocausto, un hecho que demuestra la necesidad de un estado judío independiente. Además, da una reseña ideológica del movimiento que forjó el estado, el sionismo. Siendo así, la primera parte es netamente histórica.



La segunda parte es operativa. En ésta, se relata como se ejecutará la organización del Estado de aquí en adelante.


Se anuncia la creación del Estado (en este sentido es una sección declarativa también), se anuncia el nombre que tendrá el Estado, cuáles serán los poderes que actuarán interinamente en el país, se promete el llamado a elecciones para emitir una constitución y se enuncian los cuerpos gubernamentales a elegir.


La tercera sección de la Declaración de Independencia habla de los principios y fundamentos del Estado de Israel. Esta parte es declarativa, relatando los principios que guiarán a Israel y su relación con los vecinos. El Estado de Israel "tiende su mano de paz a los árabes, basando su organización interna en la igualdad sin distinción de raza, sexo o religión".


En principio el texto de la Declaración había sido escrito por una comisión de cinco personas lideradas por Moshé Sharet, futuro ministro de Relaciones Exteriores. La propuesta contenía 22 artículos, 12 de los cuales comenzaban con la frase "Por cuanto...". El primer borrador fue acusado de ser excesivamente largo y retórico por lo que su redacción final fue encomendada a otra comisión encabezada por David Ben-Gurión.


La Declaración de la Independencia del Estado de Israel es quizás el documento más importante en el transcurso de la historia judía contemporánea, sin embargo, su importancia es ante todo moral, ya que legal no lo es tanto.


El abandono de Palestina por parte de Gran Bretaña produjo un vacío político y legal. La Declaración viene a llenar ante todo el vacío político. Ella anuncia que desde el 15 de mayo a las 0.00 horas comienza a regir otro Estado conocido como Israel. La Declaración es la que formalmente anuncia que el Estado de Israel se creó.


En este punto resulta necesario separar la importancia que da el hecho formal que remite la Declaración de la Independencia del país y el hecho de que informalmente la sociedad judía en Eretz Israel se había estado organizando durante años para ir levantando todas las instituciones que necesita un Estado.


Es por eso que cuando se anunció que el Estado se había creado, la sociedad y el mundo entero pudo comprobar que la decisión era "efectiva", ya que efectivamente estaba funcionando un Estado con todos sus componentes. Siendo así, la importancia primordial de la Declaración de la Independencia recae en que anuncia que el Estado empieza a funcionar como tal.


En segundo lugar, declara la necesidad de formalizar una constitución, la cual sería la base para la elección de los distintos entes representativos de la sociedad como el parlamento, el Poder Ejecutivo y demás. Hay quienes sugieren que la Declaración compromete legalmente al Parlamento a dictar una constitución.


Sumado a esto, la Declaración anuncia que Israel tendrá características propias del pueblo judío ya que es el estado de dicho pueblo. Las características judías se ponen de manifiesto en leyes diversas y en el comportamiento propio de los representantes del Estado.

En realidad, aún existen serias divergencias con respecto a cuáles son las características propias del pueblo judío. Para los religiosos ortodoxos las leyes judías están escritas en la Halajá (ley oral judía, reunida en el Talmud); por lo tanto no hay necesidad de declarar ninguna constitución. Para los ultra laicos, deben dejarse de lado las leyes de la Halajá para dar paso a una constitución acorde a las necesidades modernas del pueblo judío. Estos últimos sostienen la necesidad de dictar una constitución. 


La discusión entre laicos y religiosos ha tenido tintes extremos, divergencias imposibles de solucionar. Las autoridades del nuevo estado tenían conciencia de que les sería imposible solucionar dichas divergencias, por lo que buscaron un método de convivencia manteniendo el debate.


En el documento de la Declaración de la Independencia se señala que el estado se crea bajo la "Roca de Israel" o en hebreo "Tzur Israel". Las interpretaciones de estas palabras son variadas. Por un lado los ortodoxos ven en ellas el significado "Dios"; mientras que los laicos, que no aceptaban que se escribiera "Dios" en la Declaración, suponen que se trata del espíritu judío. Se buscó así, una definición que satisfaciera tanto a los religiosos como a los laicos, ya que sería imposible solucionar temas cruciales como la relación estado-religión minutos antes de declarar la independencia. La costumbre de adoptar resoluciones que contentaran a laicos y religiosos a la vez, aunque no se solucionaran para un lado o para el otro las divergencias, se repetirá sucesivamente a lo largo de toda la historia del Estado de Israel.


Finalmente, la Declaración de la Independencia es importante, ya que enuncia las bases morales que guiarán al Estado de Israel. Estas bases morales son las que orientan el accionar de las instituciones gubernamentales. Israel se basará en los principios judaicos y democráticos de un país liberal, por lo tanto muchas leyes que se dictan, tienen su base moral en la Declaración de la Independencia. Por ejemplo, una ley basada en los principios judaicos es la Ley Cortes Nupciales Rabínicas del año 1953. Según esta ley, se otorga a las Cortes Rabínicas el derecho de juzgar según la Halajá en temas concernientes a casamientos y divorcios.


Muchas leyes son promulgadas basándose en el espíritu de la Declaración de la Independencia. Esto no significa que dicha declaración tenga el respaldo legal que tiene una ley, la Declaración es sólo eso, una declaración, sin tener en su integridad un respaldo jurídico-legal. Sin embargo, en este punto es necesario analizar cada párrafo por separado teniendo en cuenta los antecedentes jurídicos que determinaron si una sección de la declaración era jurídicamente válida o no.



El problema de la constitución
Luego de declararse la independencia, comenzaron las discusiones sobre si hay que ver en la Declaración de la Independencia una constitución, en la cual deben basarse el dictamen de leyes en Israel o si es sólo un texto educativo-histórico...


Hemos analizado con anterioridad, que los párrafos primero y tercero de la Declaración son históricos y declarativos mientras que el segundo párrafo es netamente operativo. La incógnita sobre el poder jurídico del primero y el tercer párrafo fue develada a los pocos años de crearse el Estado de Israel.


En el año 1953 apareció en un diario israelí una noticia según la cual Israel cedería a los Estados Unidos 200 mil soldados en caso que éste último país decidiera salir a combatir contra la Unión Soviética. El gobierno negó el contenido de la información pero mientras tanto en Israel se desató un tumulto casi sin paralelos.


Kol Haam (La Voz del Pueblo) era el periódico del Partido Comunista en Israel, líder en el ataque contra el gobierno. En una nota de redacción bastante agresiva se acusó al gobierno de jugar a la guerra y de regalar la sangre de los jóvenes.


El ministro del Interior decidió cerrar el periódico basándose en la ley que permitía cerrar periódicos que amenazasen la paz pública. El diario no se amedrentó y elevó una queja a la Suprema Corte de Justicia, la cual debía decidir si realmente se hacía peligrar la paz pública.
La Corte Suprema de Justicia falló que no quedaba claro si el diario hacía peligrar la paz pública o no; por lo tanto, en caso que la ley no clarifique y se pueda interpretar de dos o más formas, se debe decidir según el espíritu de la Declaración de la Independencia, en la cual se promete libertad de expresión.

En este caso el diario no ponía en peligro "potencialmente" la paz pública; por lo tanto se ordenaba al ministro del Interior reabrir el periódico. En la sentencia dijo el juez Simón Agranat (que con el tiempo sería el tercer presidente de la Corte Suprema de Justicia), que aunque la Declaración no es una ley ni una constitución, expresa lo que quiere el pueblo judío de su país, por lo tanto hay que tenerla en cuenta.

El juicio "Kol Haam, 1953" no sólo dio las bases para entender cómo debe funcionar la prensa sino que en gran parte determinó cuál era el status legal de las secciones uno y tres de la Declaración de la Independencia.

Según se ve, cuando existe una ley que dice específicamente cómo debe actuarse en tal situación, entonces se decide según esta ley. Cuando no hay una ley y existen varias interpretaciones, se debe decidir según el espíritu de la Declaración a pesar de no ser ésta una constitución.

No sólo esto. Los organismos gubernamentales deben actuar según el espíritu de la Declaración. Veamos un ejemplo: en el año 1984, el ministro de Construcción pidió al Asesor Legal del gobierno su opinión acerca del siguiente problema: hubo una solicitud al Ministerio de Construcción para que este no vendiera departamentos a judíos y a no judíos en el mismo edificio, para así evitar altercados.

El entonces Asesor Legal, Itzjak Zamir dijo: "En la Declaración de la Independencia del Estado de Israel están escritas las bases que guiarán el comportamiento del gobierno y de los ciudadanos en Israel, se dice que en Israel regirá la igualdad de derechos sociales y políticos sin diferencia de religión, raza y sexo. Según la ley en Israel, los poderes en Israel deben evitar segregar entre judíos y no judíos en la venta de viviendas, como así en otros temas".

Si existiese una ley que denigrara a cierto sector de la población en Israel y que a la vez no contradijera una ley superior (por ejemplo una Ley Básica), esta ley valdría más que la Declaración de la Independencia a pesar que en la tercera parte de la Declaración se anuncia que discriminaciones de este tipo no existirán en el Estado.

El siguiente caso confirma lo anteriormente explicado. Una pareja de un kibutz del movimiento Hashomer Hatzair contrajo matrimonio ante la presencia de dos testigos sin un rabino y sin firmar el acta religiosa. En síntesis, se casaron a su manera.

La ahora familia Rogozinsky, pidió a la justicia que le reconociera su casamiento como válido ya que ellos no poseían fe religiosa y además, la Declaración de la Independencia promete libertad religiosa (tercera parte).

La justicia decidió que, según se establece en la ley de Cortes Nupciales Religiosas de 1953, la autoridad competente para todo asunto relacionado con casamientos o divorcios, es la Corte Rabínica, por lo tanto, aunque pudiera verse como injusto, la familia Rogozisnky debe casarse por el Rabinato si quiere ser reconocida como matrimonio legal.

La única forma de asegurar que las normas que establece la Declaración sean las mismas normas que deben regir en todas las leyes en Israel sería dictaminando una ley por la cual la Declaración de la Independencia se situara por sobre todas las leyes o sea, que funcionara como la base de la Constitución del Estado de Israel.

Con respecto a la segunda parte de la declaración, la "operativa", ésta sí tiene valor legal. Aquí se determina que se crea el Estado, que su nombre será Estado de Israel y que el poder recae en el Consejo Temporario del Estado, quien deberá organizar elecciones en corto plazo para dictaminar una constitución y luego, sobre la base de esta constitución se elegirían los poderes del Estado. Siendo así, la Declaración de la Independencia es la primera fuente del poder legal con que cuentan las instituciones del Estado de Israel.


El manifiesto (Minshar)
El viernes 14 de mayo de 1948 se firmó otro documento que, a pesar de ser menos conocido que la Declaración, no es menos importante. Este vino a llenar, ante todo, el vacío legal creado por el abandono del país por parte de los británicos.


Así como la Declaración de la Independencia llenó ante todo un vacío político, este otro documento cubrió un vacío legal.


El segundo documento se conoce como el "Manifiesto" (Minshar). Y este dice:
"En correspondencia con la Declaración de la Independencia, que fue publicada hoy, día viernes 14 de mayo de 1948 y según la cual se erige el Consejo Provisional y el Gobierno Provisional del Estado de Israel, declara el Consejo Provisional del Estado lo siguiente:


1. El Consejo Provisional del Estado es el Poder Legislativo. El Consejo Provisional del Estado tiene el poder de otorgar -por medio de este poder- al Gobierno Provisional, leyes urgentes.
2. Las leyes surgidas del Libro Blanco de 1939, quedan anuladas. Los artículos 13 al 15 de la orden "inmigración" (1941) y los reglamentos 102 al 107 de la guía de reglamentos para tiempos de emergencia (1945), quedan anuladas. Los reglamentos de traspaso de tierras (1940), quedan anuladas con retroactividad al 18 de mayo de 1939.
3. En tanto y en cuanto el Consejo Provisional del Estado no dictare leyes, regirán sobre Eretz Israel las leyes que regían hasta el 14 de mayo de 1948. Siempre y cuando estas leyes no contradigan lo dictado hasta ahora, las leyes futuras y los cambios surgidos al levantarse el Estado y sus instituciones".


Según el Manifiesto, todas las leyes que existían en el Mandato Británico continuarán rigiendo salvo tres tipos de leyes que quedan anuladas. Básicamente, va a existir una continuidad legal en el país sin necesidad de ponerse a dictar leyes desde cero. La continuidad no será sólo en lo relacionado con la legislatura del Estado sino también sobre los hechos que se hicieron con retroactividad. Por ejemplo, si una persona asesinó a otra durante los últimos días del Mandato Británico y sólo se descubrió el homicidio durante los días del Estado de Israel, de todos modos se castigará al culpable, ya que la ley es también para hechos retroactivos. A todo esto, los británicos habían heredado leyes otomanas, como por ejemplo la ley que dice que si existe una casa con techo no se la puede derribar. La ley israelí pasó a ser una conjugación de leyes británicas, otomanas, leyes religiosas judías y otras leyes israelíes modernas".


Se ha dicho que existen tres tipos de leyes que quedan anuladas, estas son:
1. Toda ley que niegue la soberanía israelí o que proponga darle a otra entidad la soberanía sobre la tierra.
2. En 1939 después de la revuelta árabe, los británicos dictaron el "Libro Blanco de 1939", leyes que prohibían la compra de tierras por parte de los judíos limitando también la aliá (inmigración a Israel).
3. Durante la época de la revuelta judía contra los británicos, los generales dictaron leyes secretas para justificar encarcelamientos injustificados y otras irregularidades. Estas leyes quedaron formalmente anuladas.



Notas
1. Bagatz 73/53 "Kol Haam" contra el Ministro del Interior, pd 871.
2. Dr. Zeev Segal; "Democratia Israelit" (Misrad Habitajón, Israel, 1991); p.21.
3. Ibid, p.273



(Fonte: Aurora Israel)

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